Nuestra extraña historia comienza así CAPITULO 4



- Yunho - me llamó Changmin - no quiero sonar grosero pero podrías marcharte, nosotros tenemos que conversar.
- c-claro - asentí tratando de ignorar la puntada repentina en mi pecho - nos vemos mañana - me despedí dándole un pequeño golpe de apoyo en la espalda
- gracias - murmuro

Iba a marcharme, pero no sin antes golpear casualmente el hombro del idiota cuando pasaba por su lado.

- con permiso - dije

Seguí caminado a la salida y me tope con la pequeña niña quien aún lloraba por lo que le había dicho su padre, su madre solo la miraba sin darle importancia. Me acerqué a ella lentamente y le dí el ultimo dulce que me quedaba en el bolsillo.

- toma
- gr-acias - dijo tomándolo con sus pequeñas manos - de verdad eres adivino, estuve pidiéndole todo el día a mi mamá un dulce, pero no me quería comprar - explicó con un puchero
- claro que lo soy ¿por que te mentiría?
- mis padres me miente todo el tiempo solo para que me calle - confeso con tristeza
- lo lamento - dije acariciando su cabeza.

Llegue a mi departamento rápidamente y tome mi notebook ya que por alguna razón aun no conocía el nombre del novio de Changmin. ¿Jung Ji Hoon? que feo nombre pensé, comencé a buscar imágenes de él para ver que era lo que tenia que llamo la atención de Changmin pero no debí hacerlo: era endemoniadamente sexy, odio encontrar sexy a mi rival. Changmin no caigas de nuevo.

Al día siguiente Changmin no se presentó a grabar, le mande varios mensajes pero no me contesto. Termine dos canciones en un día y apenas me desocupe fui al departamento de Changmin estuve llamando a la puerta varios minutos pero nadie abrió a pesar de que se escuchaban algunos sollozos. Me estaba preocupando.

- Yunho, Yunho, ponme atención
- ¿ah?
- tienes que empezar la promoción del disco
- lo se, pero aun no sacamos el video musical
- Changmin pidió que lo postergáramos – explicó – como ya grabaste todas las canciones y las principales están listas…
- de acuerdo – suspiré - ¿sabes algo sobre él?
- nada que expliqué porque no ha aparecido, pero ha estado grabando las canción cuando tu das entrevistas. Hay rumores de que esta enfermo y cosas así, aunque personalmente pienso que es por otro motivo.
- ya veo.

Grabas cuando yo no estoy….

- hola ¿cómo estas?
- vaya, ahora me llamas y preguntas por mi – dijo extrañada – dime que paso
- no se como me conoces tanto – suspire
- será porque nos conocemos hace mas de ocho años – dijo irónicamente y yo suspire – habla- ordenó

Le conté a BoA lo que había ocurrido, según ella él no quería hablarme ya que probablemente se sienta avergonzado y como yo sabia que la razón de su ausencia creería que lo juzgaría o algo por el estilo.

- no estoy muy seguro de que sea por eso – confesé
- yo lo haría – dijo como si fuera una razón mas que suficiente – además ¿por qué mas lo haría?
- no se me ocurre nada.
- apropósito, Yunho necesito que vengas a Corea. Quiero hacer un baile contigo para mi nueva canción Only one
- ¿por qué yo?
- porque eres mi amigo ¿hay otra razón?, ah! Cierto, eres el mejor bailarín de la empresa. Necesito que me apoyes, es la primera canción que compongo para un come back.
- has escrito mas canciones
- si, pero esta vez será la canción principal de mi regreso. Necesito apoyo moral.
- de acuerdo, pero será solo en algunas presentaciones yo tengo que promocionar aquí en Japón.
- esta bien, después de todo tenemos varios bailarines por aquí.

Al día siguiente viaje a Corea por lo que no pude saber ninguna noticia de Changmin. Trabajar con BoA siempre ha sido sencillo seguramente porque tenemos la misma edad y ambos somos perfeccionistas. Después de ensayar hasta mas no poder me puse a escuchar la canción con detenimiento.

- ¿por qué escribiste este tipo de canción?
- recuerdas mi único novio
- ¿el de hace siete años atrás?
- Lee Seung Gi – dijo – hace años le dediqué No.1… lo volví a ver hace unos meses
- ¿estas bien?

Yo estaba conciente que nunca lo había olvidado, siguió su vida y salio con otras personas, pero cada vez que escuchaba su nombre su mirada se volvía nostálgica.

- si… eso creo – sonrió – aún lo quiero, pero él tiene pareja ahora, además quiero seguir no puedo estar más tiempo pensando en alguien que ya me dejo atrás. Sietes años es mucho tiempo.
- estoy aquí, ¿lo sabes cierto?
- Yunho – dijo mirándome seriamente – necesito un hombre que no sea gay en estos momentos – dijo bromeando, aunque yo sabia que solo quería cambiar el tema.
- nunca mas tratare de ayudarte
- gracias.

Mi celular sonó de repente sorprendiéndonos a ambos. Era un mensaje de Changmin.

Supe que bailaras para el come back de BoA, buena suerte.

No me esperaba ese mensaje, pero me alegró recibirlo.

- BoA ¿crees que Changmin se siente igual que tu en estos momentos?
- seguramente.

Gracias. Me alegra tener noticias de ti.

- Ve a dormir, mañana seguiremos practicando.
- de acuerdo, no vemos.

Mi departamento en Corea estaba ordenado o al menos lo mas ordenado que se podía tomando en cuenta que yo vivía en él. Y por primera vez en mucho tiempo pude dormir tranquilamente.

5:15 am  - bip, bip, bip – se escucha y busco a ciegas mi celular.

Siento preocuparte.

Era otro mensaje de Changmin.

- hola
- hola
- ¿sabes que hora es verdad? Acabas de despertarme
- lo siento, yo no puedo dormir.
- esta bien, he descansado bastante. ¿quieres hablar de algo?
- siendo honesto… no se de que hablar – admitió riendo
- eso es… un problema, porque yo tampoco.
- cierto, tenemos un problema.

BoA me miraba extrañada mientras tocaba mis ojos.

- ¿por qué tienes ojeras? Te dije que descasaras
- una llamada interrumpió mi sueño, nada mas.
- ¿Changmin?
- ¿cómo supiste?
- cuando yo te llamo en la noche te enojas y al día siguiente andas con un humor…nadie te aguanta.
-… cierto.
- ¿algo bueno paso?
- no del todo, solo hablamos. No lo voy a presionar.
- ya veo. Bueno ahora a ensayar.

Una semana después la presentación salió al aire llamando la atención de todos. Changmin y yo seguíamos en contacto por lo que no me sorprendió lo que sucedió luego de terminar la canción.

- Estuvo genial! – decía Changmin bastante animado
- ¿ya lo viste? Pensé que en Japón no se transmitía este programa
- no se transmite, lo vi por Internet
- ya veo.
- ¿puedo hablar con BoA?
- con ella ¿por que? Pensé que te gusto la presentación por mi baile – fingí estar herido
- me gusto la letra de la canción y quería felicitarla – decía divertido por mi reacción
- de acuerdo, te la paso al tiro.

BoA tomó mi celular y desapreció con el durante un hora. ¿Por qué hablarían tanto?

Regresé a Japón tres días después para comenzar con entrevista y todas las promociones, muchas gente estaba curiosa sobre el por que había elegido a Changmin entre todos los cantantes que habían disponibles, yo solo dí razón profesional obviamente aunque no me extrañaría que varias personas no lo creyeran.  No había podido encontrarme con Changmin, pero aún nos llamábamos. En todo este tiempo no me ha contado nada sobre su relación con el idiota, digo, Ji Hoon.  Eso me preocupaba un poco.

- ¿cómo has estado?
- bien ¿y tu?
- bien… ¿tienes algún día libre? Necesito un consejo.
- puedes pedírmelo por teléfono – dije riendo
- pero quiero ver tu cara
-… veré mi agenda, espera un poco.

Últimamente sentía que prácticamente estaba saliendo con Changmin por la forma en que nos tratábamos, llamándonos cada vez que podíamos. Pero nunca hablamos de amor ni nada parecido, parecía ser su manera de no pensar en lo que le estaba pasando y no me molestaba.

- creo que puedo este jueves
- perfecto ¿puedes venir a mi casa?
- claro, ¿cómo a que hora?
-… a las ocho estaría bien – dijo tranquilo – hay tantas cosas que han pasado que tu no sabes.
- me halaga el que quieras contármelo Changmin
- Min, dime Min, ya somos amigos.
- claro, somos amigos

Estaba comenzando a odiar esa palabra.

- bueno Min, tengo cosas que hacer.
- claro – se escuchó un poco desilusionado
- te llamo cuando me desocupe
- claro. Lamento molestarte
- nunca lo haces.

Sabía que no debía hacerme ilusiones, pero realmente quiero que me ames. Tal vez nunca lo harás de la forma en que yo lo hago, pero será suficiente para mi.

- Yunho necesitamos las fotos mas sexy que puedas darnos- me explicó el fotógrafo de la revista en la que participaría este mes
- de acuerdo

Pase alrededor de treinta cuadros sin dar la sensación que me pedían, fue realmente frustrante.

- Yunho – suspiró  - intenta imaginarte delante de la persona que te gusta ¿de acuerdo?
- claro.

Delante de Changmin… que no te haría Min.

- eso, así me gusta.

Besar su cuello y marcarlo como mío. Tomar tu cintura con fuerza y aprisionarte contra una pared, besarte hasta que tu labios estuvieron rojos. Sacarte la polera para comenzar a hacerte gemir mi nombre sin descanso.

- perfecto – gritó – esa mirada era la que estábamos buscando.

Tu espalda se arquearía y tus piernas rodearían mi cintura dando espacio para que nuestras pelvis se toquen. Maldición me estoy excitando pensé algo alarmado.

- listo, terminamos
- espero que haya salido bien
- ¿bromeas? Estuviste fantástico con esa mirada y tus labios semi abiertos – dijo entusiasmado – esa persona realmente tiene suerte, sino mira como dejaste alas chicas del staff.

Me gira para ver de que me hablaba y las pude ver completamente sonrojadas riéndose tímidamente, yo solo les hice una pequeña reverencia.

- ¿lo ves?
- si, creo que ya entiendo – respondí riendo, para mi eso no era una novedad, pero me sentía un poco incomodo.

Caminó a casa de Changmin me encontré con un taco terrible, al perecer todos había decidido ir al mismo lado de la ciudad y a la misma hora. Como odio tener auto cuando eso pasa. Si pudiera teletransportarme pensé algo aburrido.

- ¿Changmin?
- ¿Yunho?
- hola, llamaba para decirte que me demoraré un poco en llegar, hay un taco horrible.
- c-claro, te espero – dijo algo nervioso
- ¿todo esta bien?
- si, solo…no tardes – Y colgó.

¿Han sentido alguna vez esa extraña sensación de vació? Como si algo malo pasara pero no sabes que, yo lo sentí en ese instante. No sabía si era algo bueno o malo, pero me ponía bastante nervioso.

- DEJEN PASAR – grité tocando la bocina

Y para mi suerte los autos comenzaron a avanzar, al parecer un choque había producido todo ese alboroto; había mucha gente ensangrentada  llorando alrededor y de cuerpo cubierto. Si antes de ver esa escena estaba nervioso ahora lo estaba más, y estaba mas que seguro que era por algo malo, ahora mi pecho me lo decía claramente.

Me estacioné en el primer  lugar que vi y corrí hacia el edificio de Changmin. Para mi desagracia el ascensor estaba en reparación y tuve que subir por la escaleras. El aire se iba de mis pulmones con rapidez, pero no me importaba, no en ese momento.

Llegué a la puerta de Changmin, esta estaba entreabierta. Entre en silencio, lo mas lento que mis emociones me permitían. Mientras me acercaba por el corredor hacia la habitación de Min mi corazón dio paso a palpitaciones salvajes, las escuchaba con tanta claridad que pensé que mi corazón saldría de mi pecho y entraría por su cuenta a la habitación.

Después de respirar unos segundos frente a la manilla me decidí a girarla y pararme en el marco de la puerta. Desde mi posición solo se podía ver un hombre de espaldas sobre la cama y otro bajo su cuerpo. El primero tenía una espalda ancha por lo que descarté que fuera Changmin de inmediato, en cambio al otro no lo podía ver con facilidad.

Avance un poco, solo dos pasos, en silencio. El hombre se refregado contra el cuerpo debajo suyo, de una manera desesperada mientras sujetaba los brazos de este. Luego comenzó a jalar su cinturón para poder abrir su pantalón sin soltar al otro.

Dí otro paso. Y se escucho un especie de gemido.

- muhgmhu
- yo se que tu quieres – dijo el primero

Esa voz…

- Hugh muchf – se escuchó y luego un claro sollozó

CHANGMIN grité internamente, como pude demorarme tanto en procesar lo que tenía antes mis ojos.

- SUELTALO – grite mientras sacaba a Ji Hoon de un golpe. Este cayó seco sobre el suelo.

Miré a Changmin quién aún estaba recostado sobre la cama con la camisa y el pantalón abierto, sobre sus boca había una mordaza. Me miraba sorprendido, pero mucho más tranquilo.

- TU – gritó Ji Hoon completamente enfadado, tanto que por un momento sentí miedo – TODO ES POR TU CULPA – decía avanzando hacia mi.

Me golpeó el rostro sumamente fuerte, en menos de un segundo ya podía saborear el sabor de mi sangre dentro de mi boca.

- ya verás – murmure

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