Creciendo... junto a ti CAPITULO 3

- Lamento esto chicos, pero el profesor acaba de avisar que no podrá venir hoy – se disculpó la encargada – pueden tomar esta hora libre, pero no abandonen el recinto.

Que aburrido. Hubiera sabido eso no habría llegado tan temprano a la universidad, no es que lo hiciera por cumplir, solamente fue porque no me pude quedar dormido. Aunque a pesar de todo llegué tarde a la sala.

“ ¿alguno de ustedes esta libre? No tendré clases este periodo”

Escribí en mi celular sin mucho ánimo, no me llevaba con mis compañeros de carrera porque no me interesaba hablarles. Sólo me juntaba con Kyuhyun, Minho y Jonghyun aunque a este último no lo veía desde que se consiguió novia.

No tuve respuesta a mi mensaje así que asumí que estaban en algo importante. De todas formas podía aprovechar de dormir un poco, tal vez al aire libre, la última vez que había dormido en la enfermería me reprendieron aunque aún no entiendo bien porque. El patio principal sería un buen lugar, así podría ver que estaba haciendo Minho en caso de que no me pudiera dormir. Si, era buena idea.

- Changmin – gritó Minho al verme mientras agitaba su mano - ¿te escapaste de clases?

- no soy como tu

- tan simpático como siempre -  dijo mirándome entrecerrando los ojos - ¿y que haces aquí? Nunca vienes a verme, a veces te he visto mirando por la ventana pero nunca me pones atención.

- te mande un mensaje explicando – comenté intentando de cambiar el tema, sentía que si se adentraba mucho me pondría en aprietos – no gastaré mi saliva ahora

Vi como sacaba su celular de su bolsillo y miraba el mensaje algo extrañado.  Genial, recién lo prendió. Eso quiere decir que si me violan y solo alcanzo a enviar un mensaje él no se enteraría. Debo tener en marcado rápido a Kyuhyun, Minho no es confiable.

- ¿Kyuhyun no te dijo?

- ¿qué cosa?

- él tiene un examen hoy – me explicó con simpleza

- ¡mierda! – solté – me va a matar ¿no le tocaba con…?

- exacto

- prepara mi funeral – le digo mientras apoyaba mi cabeza en su hombro - ¿crees que lo hecho de la sala?

- probablemente – aprovecho de envolverme en un abrazo – Changmin – susurró a mi oído

- ¿qué pasa ahora? No ves que estoy disfrutando mis últimos momentos de vida                 

- no te olvidaré – agregó dándome un último apretón

- ¿qué demo…? – mire hacia donde Minho lo hacía - ¿Kyuhyun? – pregunté asustado, era obvio que era él, pero…

- Shim Changmin – gritó – date por muerto

Y esa era mi última oportunidad para huir. Lo conocía muy bien si lograba atraparme estaba perdido. Sin más empecé a correr lo mas rápido que mis piernas me dejaron.

- ¡Maldición Changmin no huyas!, será rápido, lo prometo.

Para mi suerte mis piernas eran bastante rápidas en un momento de vida o muerte como este, pero también… algo torpes y antes de que pudiera hacer algo para evitarlo ya estaba de cara contra el suelo.

- ¿estas bien? – llegó Kyuhyun preocupado a mi lado – eso te pasa por no dejarme matarte – se quejó

- me duele el tobillo – logre decir casi en susurró, seguramente sino estuviera en un lugar semi público estaría llorando como un bebé.

- eso se ve feo -  escuché desde mi espalda

- ¡hyung! – exclamó Minho algo extrañado - ¿qué haces aquí?

- vi como alguien rodaba por la pista – explicaba mientras se acercaba – por eso vine a ver que ocurría.

- ahh

- ¿te duele mucho? – me preguntó Kyuhyun en voz baja

- demasiado – admití con los ojos algo acuosos, pero no quería llorar, no ahora que estaba esa persona cerca.

Definitivamente no iba a hacerlo, apenas si puedo controlarme para no llorar, pero no permitiré que ni él ni nadie me vea así. Incluso Kyuhyun y Minho se veían tan sorprendidos por mis ojos llorosos. Ni hablar no lloraría, mi orgullo no me lo permite. Pero mi tobillo dolía tanto.

- ¿lo llevó a la enfermería? – pregunto y yo entre en pánico, no me quedaría a solas con él.

- Kyuhyun puede llevarme

- lo siento Minnie – dijo robándome la rodilla – cambio de ahora y tendré que entrar a la sala.

- ¿Minho? – pregunté esperanzado

- lo siento, estamos en pruebas y pronto será mi turno – dijo apenado - ¿hyung podrías?

- no, por favor – murmuré y Kyuhyun me miró extrañado.

Esa acción era la prueba de que yo no me comportaba como siempre cuando él estaba presente. La pregunta era ¿por qué? Al fin y al cabo solo me atraía su sonrisa, nada más. Aunque si lo veo con detenimiento, la forma de su boca es bonita también.

- yo te llevo – comentó acercándose – déjame tomarte así, de esta forma no pasare a llevar tus pies.

Maldición.

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