Creciendo... junto a ti CAPITULO 7

- ¿qué haces aquí?

- simplemente te seguí porque no te veía muy bien – respondió apoyando en la pared a mi lado – ¿no soportas estos juegos verdad?

- no del todo – suspiré – había planeado irme, pero luego llegaste y no puedo dejarte solo con ese par – bromeé

- ¿gracias? Deberías subir a otro tipo de juegos – sugirió Jonghyun algo preocupado - ¿te pasa algo mas?

- no

- ya veo… te veo algo incómodo, muy pendiente de los compañeros de Minho tal vez – comentó con un tono sugerente

- no es nada de lo que piensas – deje en claro.

-… ¿qué te pasó en el pie?

- me caí mientras escapaba de Kyuhyun – le conté avergonzándome un poco, sonaba bastante infantil lo sucedido.

- te creo – rió jalándome las mejillas. Odio cuando hace eso.

Miré hacia donde estaban todos bajando de un juego, el único que hasta ahora había logrado evadir. Minho y Kyuhyun se estaban divirtiendo eso era evidente, con un poco de suerte se olvidaran de mi y podría volver a casa. Los amigos de Yunho parecían algo mas afectados por tanto movimiento pero eso no lograba frenarlos.

Yunho era un caso aparte, no parecía estarse divirtiendo. Varias veces me había topado con su mirada, parecía querer preguntarme algo pero no se atrevía. Además pude notar que no había hablado mas de lo necesario en todo este tiempo. Pero lo que mas me llamo la atención era que no había cruzado palabra conmigo ni con Jonghyun.

- iremos por unos jugos ¿quieren? – se acercó Minho a preguntarnos mientras contaba el dinero que había dentro de su billetera – yo invito.

- no gracias, yo iré al baño y vuelvo.

La última vez que Minho me invitó algo termine pagándolo yo y en estos momentos no estaba para gastos extras.

- extraño baño – dijo de manera sarcástica una voz tras de mi. Apenas volteé a ver de quien se trataba me arrepentí, era él y esta solo. Estábamos solos.

- ¿qué haces aquí? – pregunté luciendo bastante molesto aunque en el fondo no lo estaba, sólo estaba sorprendido. Él hizo una pequeña mueca.

- les dije que iba a hablar por teléfono y casualmente te encontré a ti en el camino – explicó mirándome a los ojos firmemente. No sabría decir si su intención fue intimidarme de algo forma, pero lo fuera o no él lo logró, me puso sumamente nervioso.

- los teléfonos están al otro lado del parque – le dije tratando de burlarme pero solo logre que saliera un pequeño hilo de aire.

- tengo celular – soltó mientras lo sacaba de su bolsillo y daba un paso hacia mi – pero repentinamente cambie de opinión.

- ya veo – dije retrocediendo - ¿volvemos con los chicos? – pregunte casi rogando y él se me quedo mirando y luego rió.

- claro, dijeron que se subirían a la rueda de la fortuna – respondió apuntándola - ¿vamos?

Y ahora era la segunda vez que era llevado por él hacia alguna lugar, pero esta vez yo caminaba sin oponerme, después de todo iríamos con nuestros amigos. Ese era el plan. Ese era mi plan.

Una vez junto a la noria el nerviosismo me invadió, era mucho mas grande de lo que parecía, pero lo que mas me extraño fue no ver a nuestros compañeros en ningún lado.

- ¿dónde están?

- mira están arriba – exclamó y antes de que pudiera mirar a alguno de los cubículos me jaló hacia adentro de uno.

- suéltame – le exigí molesto – no me gusta que me anden tironeando por todos lados.

No cruzamos palabras por algunos minutos, hasta que llegamos a la cima y la noria se detuvo, lamentablemente para mi, no fue como en las escenas de los mangas… simplemente se detuvo porque la electricidad falló y prácticamente quedamos atrapado allí.

- ¿qué demonios? – casi grite debido al brusco movimiento.

Me asomé con mucha dificultad por la ventana asombrado al ver como todas las luces de apagaban de a poco. Para esas alturas ya era demasiado tarde y sin luces apenas podríamos ver que pasaba, pero si logre verlos. Minho, Kyuhyun y los demás estaban a un lado del carrito de comida casi al otro lado del parque. Luego el parque quedo completamente oscuro salvo por la luz de las estrellas y la luna que para mala suerte apenas se veían.

- Me mentiste – le recrimine en voz baja, aun mirando por la ventana.

- no lo hice… solo vi mal – dijo mintiendo claramente mientras apoyaba su mejilla en su mano y parte de su cuerpo en la ventana. Su actitud me desagradaba pero al mismo tiempo me parecía un poco ¿atractiva? Tal vez.

Su sonrisa se dejó ver por la luz de la luna antes de que fuera cubierta por un montón de inesperadas nubes. Esa si era una sonrisa de verdad no como las que había tenido durante todo el día. Ya era hora de que realmente disfrutara algo, pero tenía que hacerlo cuando estábamos atrapados aislados de todos.  ¿encontraba la situación divertida? Porque yo no le hallaba gracia.

- ¿nervioso? – preguntó Yunho divertido

- para nada – respondí desafiante, no sería su payaso, si quería reír que fuera por otra cosa.

Y extrañamente se escuchó como pequeñas gotas de agua mojaban la ventana y el techo. Genial. Ahora  les tomaría más arreglar la corriente. Él sonrió, como si se diera cuenta de lo que estaba pensando. Solo espero que no tarden mas de diez minutos.

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